Los trabajos supondrán una inversión de 61.000 euros y tendrán un plazo de ejecución máxima de 6 meses desde su inicio.

El antiguo molino harinero de viento de Sestrica, es uno de los pocos ejemplos de este tipo de construcciones en Aragón y es de los más modernos, además es parte del escaso patrimonio industrial de la comarca del Aranda. Esta semana  han comenzado  las obras de acondicionamiento de este emblemático edificio, bien de interés material, como recurso turístico para esta pequeña localidad de unos 200 vecinos y del resto de la comarca, según han informado desde el Ayuntamiento de Sestrica.

Los trabajos supondrán una inversión de 61.000 euros y tendrán un plazo de ejecución máxima de 6 meses desde su inicio. La intervención está incluida en el Plan de Sostenibilidad Turística de la Comarca del Aranda.

“Llevamos con este proyecto desde 1996, era particular lo que hacía inviable poder intervenir sobre él, así que hace algún tiempo se adquirió junto a las eras del entorno para poder actuar”, explica el alcalde de Sestrica, Miguel Pinilla. “El estado en el que está es mejorable, no tiene cubierta y las afecciones climáticas han contribuido a su degradación así como las palomas que lo han utilizado de refugio, durante años, de ahí que se le  conozca en el pueblo como “El Palomar”, recuerda Pinilla que espera que sea un nuevo atractivo para los vecinos y visitantes

El molino mediterráneo de torre cilíndrica de Sestrica data del siglo XVIII y se utilizaba como elemento de transformación de los productos agrarios.

Según se detalla en el proyecto, la intervención se centra en salvaguardar y estabilizar la estructura del edificio, evitando que se agraven  su deterioro y para ello se colocará la cúpula y las que den coherencia al inmueble y su acondicionamiento para hacerlo visitable. Se instalará una escalera helicoidal  que servirá para el acceso a la planta mirador. Se procederá además a constituir una solera interior que favorezca la limpieza y mejore la visita de la estancia. Se colocará un pararrayos para proteger el edificio de los efectos de una descarga eléctrica.

La actuación llevada a cabo en el molino de la cercana localidad de Malanquilla inspira el proyecto de recuperación de este “gigante”,  similar a los famosos molinos manchegos.